El Capamala es una tortuga colosal, altamente tóxica, que disfruta devorando a otros seres, incluyendo a los humanos. Habitan zonas corrompidas con altos niveles de humedad, especialmente pantanos y áreas con aguas estancadas. La combinación de su caparazón endurecido y su agresividad los convierte en uno de los principales depredadores de estos lugares.
El Capamala es particularmente vulnerable a las bajas temperaturas y a las habilidades benditas. Además, una fuente de luz intensa puede aturdirlos por un turno completo, aunque no siempre reaccionan de la misma manera ante esta debilidad.
| Información | Especificaciones |
|---|---|
Especie |
Tortuga corrompida. |
Personalidad |
Los Capamalas son criaturas extremadamente estúpidas e impulsivas. No toleran ninguna intrusión en su territorio y reaccionan con agresividad ante cualquier ser que ingrese en sus dominios. No tienen un instinto protector hacia sus crías, lo cual los hace especialmente descuidados con sus huevos. |
Hábitat |
Pantanos y áreas con alta concentración de corrupción. |
Comida Favorita |
Carne en general. |
Género |
Son asexuales y pueden poner huevos por sí mismos, aunque no cuidan de sus crías. |
Habilidad Especial |
KoopaBuena: La Capamala posee un caparazón inmune a absolutamente cualquier ataque, sin excepción alguna. No hay, no existe, no es posible dañarlo. Sin embargo, sus patas y su cabeza son más débiles que su caparazón. En caso de que a la Capamala le dé la inteligencia suficiente para hacerlo, ella podrá esconder su cabeza y sus brazos en el interior de la concha, comenzando a moverse por la tierra girando con su caparazón a toda velocidad. (La velocidad es progresiva y cada 10 metros recorridos suma 200km/h hasta un límite de 1000km/h). Puede mantenerse por dentro de su caparazón 3T seguidos. Aún así, tiene un CD de 5T. |
Atributo Especial |
Su caparazón es completamente indestructible, lo que le otorga una defensa absoluta contra cualquier tipo de ataque. |
Los Capamalas son animales bastante torpes y propensos a caer en trampas, lo cual facilita su captura.
Sin embargo, debido a su fuerza y agresividad, representan un gran peligro si no se toman las debidas precauciones.
Domesticar un Capamala no es una tarea sencilla, y métodos tradicionales de doma resultan inútiles.
Solo mediante el uso de dolor y castigo pueden ser inducidos a obedecer, aunque esto es un proceso riesgoso.
Existe un pequeño porcentaje de probabilidad (5%) de que el Capamala se aterrorice y huya al enfrentarse a una luz intensa.
Además, muestran un temor notable hacia criaturas desconocidas como los Nergigantes.
